La elección proviene básicamente de un ¨auto-sinceramiento¨ dado que desde que descubrí el tema hasta hoy le he robado muchísimas veces. Por otro lado, vuelvo en el tiempo y recuerdo esa idea o moraleja que dice que «de las peores experiencias siempre se puede sacar algo bueno». Creo que este es el caso.
A principio del 2000 descubría a Los Natas y durante mucho tiempo me dije: “Tiene que haber una banda en Rosario que suene así”. En el 2005 arranqué en un trabajo que no me gustaba, la pasaba muy mal. Por suerte ahí conocí un amigo que un día vino y me dijo: “Che, pibe a vos que te gustan Los Natas, escucha esto”. Y me regaló un CD grabado con el nombre escrito en fibrón: Aguas Tónicas.
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Varios años después, sigo caminando las calles Rosarinas con El Expresso a cuestas, y no dejo de sorprenderme y agitar mi cuerpo, reviviendo y sacando nostalgias de viejas historias caídas.
Vale aclarar que hoy en día Los Natas siguen siendo Los Natas, pero los Aguas Tónicas nunca dejaron de crear, crecer y experimentar. Es por eso que hasta hoy no sabemos bien quienes son o que hacen, lo que sí sabemos es que transmiten y trasmitieron, siempre vigentes de ser.
Esta experiencia, este laburo, este compañero no solo me llevaron a conocer a todos los AT, a Maru Conti con quien estoy eternamente agradecido; a Discos del Saladillo y a todos sus integrantes, sino que también me llevó a desarrollar y crecer como músico, dándome nuevos conocimientos y espacios donde luchar el día a día.
El tema de Aguas Tónicas es parte del album que lleva el nombre de la banda
