Las autoras escribieron un libro que son dos, hay dos tapas –todos somos la contratapa de alguien–. Ellas son amigas y poetas, una manera de cultivar una amistad que genera espacios de creatividad compartida.

Dos portadas: en una Anabel y Cecilia, en otra Cecilia y Anabel. Están sumergidas, flotando con los ojos cerrados, con movimiento del agua sobre el cuerpo. 

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En "Ese animal tierno y voraz", el libro que presenta en Rosario, Ivana Romero inventa una vida para un ignoto peatón y también para Amy Winehouse.

Los poemas son una geografía de pensamientos mojados, un universo en común. Se escucha la conversación sobre el ritual, el diálogo en las duchas, y de ahí cada una va a buscar las referencias a su propia experiencia en suelo sensible, siempre en una intimidad compartida. Hay una base narrativa y sonora, un diálogo entre los poemas. Comparten un ritmo, la inquietud de sus manos, sus ademanes simbióticos exaltados. Imagino sus brazadas y sus risas en la pileta enorme y azul donde fueron fotografiadas para las tapas y contratapas reversibles.

El agua lava los pensamientos y los deja brillantes. La ducha moja los versos, es el momento del mientras, bombardeo sinestésico. El cuerpo como superficie recibe marcas, es receptáculo de sentidos. El cuerpo no es reversible.

En Las cosas que pensé en la ducha, el agua aparece en forma de río, en el sonido, en la cañería de un vestuario, en cada parte del cuerpo, en forma de lluvia. Ducharse es una acción universal, y sin embargo íntima, sensitiva. Humanidad compartida y única en la inmediatez del cuerpo, en la materialidad palpable.

Los científicos creen que la ducha, al segregar buenas dosis de endorfinas y dopaminas, activa conexiones que aumentan la capacidad cerebral y así ganamos claridad. Con el “efecto ducha” dirigimos la atención hacia pensamientos internos. Nos replegamos dentro de una cápsula.

Las prácticas de baño a lo largo del tiempo han reflejado los cambiantes ideales en torno a diversas cuestiones, como la salud, la higiene, los modos. Durante la mayor parte de la historia de la humanidad, nos hemos bañado para socializar, relajarnos e incluso celebrar fiestas. Como ritual comunitario, los baños colectivos han desempeñado un papel fundamental en la vida cotidiana, hoy se prefieren las duchas en soledad.

De pie bajo la ducha. El agua cae sobre la cabeza, los hombros, los ojos entrecerrados, el agua pesa en las pestañas. Una gota se fija en el pezón.  Buscás que el chorro dé justo donde late, podés llorar porque las gotas se confunden. Es el vapor el que ablanda el pensamiento. El agua actúa como un ruido blanco que bloquea otros sonidos, los sentidos van hacia adentro. Escuchar el agua caer de la ducha al piso pasando por el cuerpo para nunca más volver. La función del verso en la ducha como quien canta entre el vapor que nubla la mampara.  Bañarse para atrás o para adelante. Móviles anfibios: ducharse instala el pensamiento en el poema. Pura sensación la tactilidad como modo de pensar. ¿Qué pensás vos cuando te duchas?

El libro se compone con partes íntimas de un soliloquio en plena zambullida: la espuma que desaparece, el jabón que resbala como una mojarrita, la bruma de los días, lo que el agua calma, las gotas en la amígdala si abrís la boca, cómo se borra lo que quedó entre las cejas o la clavícula, sumergirse en silencio, confesarse en un espejo empañado. Textos hechos de una materia suave y húmeda, imágenes potentes de gran sensorialidad: una experiencia de sensualismo. 

Las cosas que pensé en la ducha

Nuevo título de Perfeito Ediciones, editorial rosarina de gestión colectiva. Diez poetas forman parte de la editorial independiente Perfeito que lanzó, desde 2018, catorce libros. El trabajo colaborativo y afectivo marca el acompañamiento de cada nueva edición.

Escrito en dupla por Anabel Martin y Cecilia de Michele. Anabel Martin (1979) nació en Rosario. Es Profesora de Teatro, da clases de yoga y entrenamiento. Trabaja como editora de publicaciones independientes. Publicó Fiesta, libro de poemas junto a su grupo editorial Cedro. Cecilia De Michele (1984) nació en Concepción del Uruguay y vive en Rosario desde los 18 años. Es politóloga, poeta y gestora cultural. Autora del poemario Vecino y de La creciente, que publicó en 2022 a través de Perfeito, editorial de la que forma parte.

Es el segundo libro de la colección Amiga, la cual se inauguró en el 2023 con el título Qué bajo hemos caído de Alejandra Benz y Agustín González. Las fotos preciosas y el arte de tapa son de Mariana Terrile, fotógrafa rosarina y parte de Perfeito.

Dengue
Sobre el autor:

Acerca de Natalia Leggio

Nació en Rosario. Es Licenciada en Ciencias Sociales y Humanidades. Forma parte del colectivo editorial Cedro, con quienes editó los libros de poesía Civil de Sebastián Sánchez y Fiesta de Anabel Martin. Integró el colectivo poético Eveling, realizando acciones performáticas poéticas en distintos espacios de la ciudad de Rosario. Formó parte del colectivo editorial Cortada, […]

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